Hoy les voy a hablar de algo fundamental a la hora de los
exámenes: simplificar
Muchas veces tendemos a pensar que cuanto más complejo el concepto
que logramos aprender, mejor nos irá. Este es un error común, primero porque no
demuestra aprendizaje sino memorización y eso es algo que los profesores no
quieren; piénselo, tener que releer
citas de libros que probablemente leyeron miles de veces no va a ser lo que más
deseen.
Segundo, cuánto más complejo, más difícil va a ser aprenderlo,
por eso simplificar es el remedio a todos nuestros males estudiantiles.
Cuenta la leyenda un artículo que leí, que para poder
sobrevivir en los exámenes, tenemos que ser capaces de resumir el curso en dos
hojas. Lo sé, parece más que imposible; en lo personal cada vez que utilicé
este método, usar solo dos hojas me fue imposible pero llegué a 3 y eso me
ayudó mucho.
Para lograr hacer mini resúmenes, solo hay que tener 2 cosas: paciencia
y práctica, recuerden, lo más importante es sintetizar los conceptos y poder
explicárselos a cualquiera.
Ese mito de poder explicárselo a un niño de 5 años, no es para
nada un mito; el día de mañana, los que hagan abogacía tendrán que poder
explicarles a los clientes el mejor camino para resolver sus problemas y las
consecuencias de tomar uno u otro camino.
Practiquen ahora y eviten tener 5 o 6 libros que leer una y otra
vez, sólo para un examen.
Saludos
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